Aqui yo dispongo y ordeno

Vctor Muoz, consecuente con su mejor estilo, regresa a sus lectores y se afianza como uno de los narradores latinoamericanos ms interesantes que han surgido desde finales del siglo pasado hasta lo que va del presente.
Fue un gran gusto, y por qu no decirlo, un verdadero deleite leer esta novela, imposible de soltar una vez que se ha comenzado. Conjeturo que fue escrita casi sin descanso, as como habr de ser leda. Me he redo a ms no poder desde el principio hasta el fin; sin embargo, a veces risa amarga por nuestra desventura, pero risa al fin.
En esta novela, escrita ms bien como un cuento largo, Vctor recrea una especie de ser supremo muy tropical al que nunca abandona y al que va llevando por una serie de situaciones, todas de corte poltico, con humor exorbitante, y a veces hasta con humor negro, que habr de hacer que el lector se detenga para carcajearse y luego reflexione acerca de cmo fue posible que las situaciones que l expone se hayan dado. Pero se dan.
Como todo buen relato latinoamericano, desde el mero principio, Vctor va dando a conocer a su personaje principal y al lector no le queda ms que soltar una carcajada tras otra y darle crdito al autor por haber escrito un libro tan revelador y ameno. (Ricardo Cordn Herrarte)