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Despus de transitar por los inquietos senderos de la historia, comprob lo dainas que ha sido para la humanidad, las consignas lanzadas por los Populistas. La primera que lleg a mi consciente, fue la lanzada por los revolucionarios franceses contra la Reina de Francia: Maria Antonieta. La que ms me lastim, fue cuando un miembro del Versalles le dijo a Maria Antonietta: que el Pueblo se estaba quejando, por no tener Pan para comer. Y Maria Antonietta le respondi: "Si no tienen Pan que coman bizcocho."
Pero, como todas las consignas de los populistas; se comprob que ello era una vil falacia: Pues, mientras la propagaban por toda Francia, en su Capital, Paris; le cortaban la cabeza en la guillotina a la carismtica Reina Maria Antonieta de Viena. Que an a la hora de su muerte, mostrara su dignidad; que era hija de Maria Teresa de Austria: "Cuando el verdugo trat de quitarle el cuello de su vestido, con sus manos, por donde se lo cortara; al tiempo que se las quitaba, Maria Antonieta le deca: Saca tus sucias manos de mi cuello, que me lo vas a ensuciar! Yo lo har!"
Cuando me enter de la salvaje actitud de los revolucionarios franceses encabezado por el sanguinario Maximilian de Robespierre; comprend que Jose Mart era un adelantado: En el Siglo XIX, nuestro Apstol nos dijo: "Los hombres van en dos bandos: Los que aman y construyen y los que odian y destruyen." Y que, por sus sanguinarias acciones: Robespierre perteneca al bando de los que odian y destruyen. Tambin; que en Fidel Castro y su hermano Raul: Robespierre tena a sus homlogos.
Pero, como todas las consignas de los populistas; se comprob que ello era una vil falacia: Pues, mientras la propagaban por toda Francia, en su Capital, Paris; le cortaban la cabeza en la guillotina a la carismtica Reina Maria Antonieta de Viena. Que an a la hora de su muerte, mostrara su dignidad; que era hija de Maria Teresa de Austria: "Cuando el verdugo trat de quitarle el cuello de su vestido, con sus manos, por donde se lo cortara; al tiempo que se las quitaba, Maria Antonieta le deca: Saca tus sucias manos de mi cuello, que me lo vas a ensuciar! Yo lo har!"
Cuando me enter de la salvaje actitud de los revolucionarios franceses encabezado por el sanguinario Maximilian de Robespierre; comprend que Jose Mart era un adelantado: En el Siglo XIX, nuestro Apstol nos dijo: "Los hombres van en dos bandos: Los que aman y construyen y los que odian y destruyen." Y que, por sus sanguinarias acciones: Robespierre perteneca al bando de los que odian y destruyen. Tambin; que en Fidel Castro y su hermano Raul: Robespierre tena a sus homlogos.
- Format: Pocket/Paperback
- ISBN: 9781506528144
- Språk: Spanska
- Antal sidor: 258
- Utgivningsdatum: 2019-02-21
- Förlag: Palibrio