El alegre cuartito del terror

A continuacin, un extracto de "El alegre cuartito del terror": -De acuerdo, Ismael. Siempre estuviste solo? -No, Daniela, vinieron otros nios y tambin algunos adultos, pero todos fueron muriendo con el tiempo. Tal vez yo haya sobrevivido porque aprend la forma de alimentarme y los otros no quisieron hacerlo, aunque quise ayudarles. Rafael escuchaba muy atento el dilogo sin intervenir y cada afirmacin de Ismael haca que su angustia aumentara. -Mis padres nos sacarn de aqu y tambin te liberarn a ti -dijo Daniela a modo de consuelo, tanto para Ismael como para ella misma. -Eso tambin crea yo, y los dems que han cado en esta trampa. Pero no es posible hallar este lugar, est en otro mundo. Rafael se dej caer contra la pared y comenz a llorar en silencio. -Lo sospechaba -pens Daniela y los ojos se le llenaron de lgrimas-. La tecnologa que usan no es de la Tierra. -No lloren. Miren, les preparar unos sndwiches -Ismael busc entre sus harapos y sac unos trozos de pan, despus se puso de rodillas y busc entre la paja donde haba estado sentado y se enderez con tres ratas tomadas de la cola-. Las cac mientras ustedes dorman -y sin notar la cara de espanto de los chicos que lo miraban con ojos desorbitados, puso una rata entre dos trozos de pan y se lo ofreci a Daniela. -No, gracias, Ismael -atin a decir antes de correr a la letrina y vomitar. -Y t, Rafael? -No, no, gracias -dijo tratando de evitar las arcadas con el rostro totalmente amarillo. -Lo siento -dijo Ismael dndole un gran mordisco al sndwich recin preparado, lo que hizo que tambin Rafael corriera a la letrina-. Veo que todava no tienen hambre. Ismael continu comiendo con aparente deleite mientras los chicos con el rostro amarillento trataban de mirar hacia otro lado, pero fascinados, no podan dejar de volver la vista a cada momento para ver cmo el pan y la rata iban desapareciendo dentro de Ismael, quedando fuera al final, nicamente parte de la cola y la cabeza del animal.