Los rboles crecen por las races, las personas por los amigos

El título del libro es una realidad: somos mejores gracias a nuestros amigos. Los amigos nos cuidan, nos alegran, nos dicen lo que debemos mejorar. Con ellos nos divertimos, abrimos la intimidad, soñamos y también nos ponen los pies en la tierra.
El problema es que en muchas ocasiones usamos la palabra amistad sin que lo merezca: decimos amigo a quien solo es un compañero de estudios o de trabajo, también damos ese título a alguien a quien apreciamos aunque no haya una verdadera confianza, incluso usamos esa expresión con cualquier desconocido cuando no sabemos su nombre.
En este libro pretendo explicar mi particular hipótesis sobre las características básicas de la amistad, esa relación entre dos personas donde el interés genuino por el otro y la confidencia demuestran con hechos el cariño que les une y les hace feliz: la coincidencia, la afinidad subjetiva y la objetiva, el conocimiento mutuo, la confidencia, el cariño y la lealtad.