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102 sidor
2016

Mi nombre es Ana C. Dávila y nací en Santurce, Puerto Rico. Mis padres fueron Ana M. Latorre y Josué Pérez Vergara. Fuí criada por mi abuela durante mis primeros años en Guayama, Puerto Rico. También conocida como la Ciudad de los Brujos. En décimo grado conocí a mi esposo Pastor Ramón Dávila. Me gradué de escuela superior en el 1985 y tenía dieciocho años cuando nos casamos. Llegamos a Florida en el 1987. Llevamos 30 años de casados (y contando) y tenemos la bendición de tener tres hijos seguros y saludables Lilliana M., Samuel A. y Alexandra E. Dávila.

Han pasado 18 años desde que El Señor le dió a mi esposo el llamado de pastor y después de una larga jornada El Señor me dió el llamado de pastora. Yo estudié en el Instituto Latinoamericano Del Concilio Pentecostal, Instituto Bíblico en Orlando, Florida. Y gracias le damos a Dios que tenemos una iglesia cuyo nombre es: Iglesia Nueva Vida De Orlando donde actualmente pastoreamos. En mi vida secular cuando llegué a Florida, yo empecé a trabajar en supermercados, guardería y en un Burger King, restaurante de comida rápida. También ayudé en la escuela pública con el programa “Un Poquito de Español”.

Hace doce años que trabajé en la escuela elemental Cheney, los primeros dos años como asistente de maestra y los siguientes diez años, El Señor me dió la oportunidad de trabajar en la oficina como recepcionista billingüe. Al Señor le plació removerme de mi trabajo secular en el 2012 para que trabajara completamente para Èl. Yo le dí gracias a Dios por mi trabajo porque fué una manera de evangelizar vidas. Tres años atrás yo escribí un libro que El Señor me mandó a escribir que se llama Mi Jornada, sobre la transformación de mi vida através un accidente que destrozó mi tobillo en granos de arroz. En el 2012, yo fundé El Instituto Bíblico Nueva Visión. Un Instituto Bíblico donde líderes, pastores o gente con ministerios en sus iglesias o personas interesadas pueden obtener un conocimiento mas amplio sobre la palabra. Yo deseo que El Señor te continue bendiciendo grandemente como lo ha hecho en mi vida y que continues trabajando al servicio del Señor.

Que Dios Te Bendiga

Pastora Ana C. Dávila