Rfagas Sin Dueo

Existe an quin se pregunta, por qu me inclino a escribir poesas. Y yo contestara; Es la bsqueda continua del alma, es el constante e infinito descubrir.
Y qu dira de esa preciosa sonrisa, ese hombre que te atrae.
El paso del tiempo que se guarda en la memoria, infinidad de recuerdos, vagos sonidos que como un torbellino te van llenando tu cabeza y son parte de tu diario convivir, una conversacin, un instante intangible que te absorbe, todo real y lo dejas plasmar en tus rimas.
Se puede hablar de una delicada y solitaria hoja desprendida de los rboles que se posa a tus pies, te haces te preguntas, una simple hoja perpeta instantes, momentos de un ayer donde aquella persona amada colocaba una diminuta hoja entre tus manos.
Quizs alguna vez te reflejaste en un espejo colocando entre tus cabellos una bella flor. Fue ayer. Hace aos, semanas, a ciencia cierta no lo sabes. Esa flor como la de aquel amor, te dice te quiero. Djame capturar ese vago recuerdo, revivirlo y contar esa historia.
Con esta vocacin insaciable, despiertas la imaginacin de tantos, anhelas acercarte al corazn de quin te lee.