Los paraisos perdidos

Los parasos existen. Aunque no todo el mundo los llegue a conocer, existen.

Hay que saber llegar a ellos. A veces se esconden detrs de las rocas, nos observan, nos llaman y, a veces por miedo, no queremos orlos, pero nos llaman, nos persiguen en los sueos, en los anhelos, y solo con valenta y sosiego algunos son capaces de encontrarlos, de hallarlos al fin, y de vivirlos, cada cual el suyo propio.

A veces es necesario perderlos para poder encontrarlos, rehechos, sinceros, maduros, leales, ms grandes. Aunque ello suponga encontrarlos ms tarde, mucho ms tarde de lo que quisieras, pero ms fuertes, ms tentadores, ms increbles, ms parasos.

Dos personas, un hombre y una mujer, por separado, pero juntos en su mente, se dejan llevar por la corriente de la vida mientras se buscan a s mismos, entre ellos, y a ellos. Se llaman Adn y Eva, y viven en el siglo XXI.