Pleberio - Die Figur und ihre Funktion fr Fernando de Rojas' "La Celesina"

Studienarbeit aus dem Jahr 2009 im Fachbereich Romanistik - Spanische Sprache, Literatur, Landeskunde, Note: 1,0, Ruhr-Universität Bochum (Romanisches Seminar), Veranstaltung: La Celestina, Sprache: Deutsch, Abstract: El presente trabajo describe cómo el personaje de Pleberio actúa en la tragicomedia La Celestina. Al principio de la obra, solamente lo mencionan a él, luego Pleberio está presente en unas cortas escenas pero al final es el único personaje en el último acto, el así llamado Llanto de Pleberio. En el transcurso de la tragicomedia, se pasa de tener de un carácter secundario a un papel principal.
Sigue una caracterización de Pleberio en la cual se presenta como Rojas le concibe. Su nombre señala que pertenece a una nueva clase de la sociedad: Indica que es un gran burgués lo que armoniza con los indicios de su linaje que están en el texto. Antes de casarse y fundar una familia, Pleberio era probablemente un constructor naval. Ganaba tanto dinero que podía jubilarse como gran burgués para quien adquirir bienes, que puede dejar en herencia, es el único sentido de su vida. Según él, es posible comprar honra. Otro aspecto importante de su concepción es su religión. Hay varias teorías sobre su confesión, pero sin embargo ninguna de ellas parece ser fundada. Además, Rojas utiliza el modelo del durus pater para la presentación de Pleberio que más tarde en el argumento de la tragicomedia, no encaja bien porque el personaje se hace ridículo.
El Llanto de Pleberio toma el antiguo planctus como referencia. En él, el padre llora por la muerte de su hija Melibea y se lamenta de la Fortuna, el mundo así como del amor y se siente estar a merced de ellos. Por su autoengaño, no entiende que es también responsable de su situación. Por ello, se presenta el pensamiento de Petrarca, al que Rojas suele citar e interpretar en La Celestina frecuentemente. Fernando de Rojas critica la sociedad de aquel tiempo de un modo personal e intenso dado que los personajes de la tragicomedia actúan como unos ejemplos negativos de modo que el lector no puede sentir la menor simpatía por ellos.